Publicado en La Tercera
Ensayo comenzó el pasado viernes e incluye a 550 voluntarios, entre ellos personal de salud y residentes de hogares de ancianos, quienes están recibiendo dosis de Pfizer, AstraZeneca y CoronaVac. La idea es evaluar si una tercera dosis mejora la respuesta inmune y determinar cuál sería el esquema más idóneo.
“Vamos a implementar en cuanto podamos, a la brevedad, una tercera dosis”, aseveró en el último reporte el ministro de Salud, Enrique Paris, agregando que el tema está siendo analizado con las subsecretarías de la cartera y el Presidente Sebastián Piñera.
El anuncio de Paris vino a reforzar los dichos de la subsecretaria Paula Daza en La Tercera Sábado, quien afirmó que ha llegado a la convicción de que será necesario un refuerzo de la vacuna, principalmente para los inoculados con el esquema completo CoronaVac: “Sí, vamos a tener terceras dosis para las personas que lo requieran durante este año”, dijo la subsecretaria, detallando que lo pendiente ahora es definir el esquema booster que se utilizará, el que podría ser combinado.
Y en el mundo, pese a que la evidencia aún es acotada, ya han dado el primer paso. Específicamente en Israel -líder en vacunación y donde se ha utilizado únicamente Pfizer-BioNTech- ayer comenzaron a inocular con tercera dosis a los pacientes con mayor riesgo inmunológico, a propósito de la presencia de variante delta.
“Existe una creciente evidencia de que los pacientes con inmunosupresión no desarrollan un nivel satisfactorio de anticuerpos después de dos dosis de la vacuna contra el coronavirus, algunos pueden desarrollar estos anticuerpos después de tres dosis”, señaló el Ministerio de Salud de Israel en un comunicado.
“Yo creo que vamos a seguir la misma estrategia que Israel, es decir, vacunar primero a los adultos mayores, a aquellas personas con comorbilidad y no podemos olvidarnos también del personal de salud. Vamos a dar la noticia cuando estemos preparados e indicar la fecha en la cual comenzaríamos con tercera dosis”, agregó Paris.
En ese contexto, Chile está avanzando rápidamente. A la vez que la semana pasada 10 pacientes inmunosuprimidos ya habían sido autorizados para recibir una tercera dosis de Pfizer -a través del Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI) y a solicitud del respectivo médico tratante-, el Ministerio de Salud está impulsando -bajo total reserva- un estudio que permitiría definir, concretamente, cuál vacuna de refuerzo podría usarse para mejorar la respuesta inmune frente al Covid-19.
Estudio clínico en marcha
Así, el pasado viernes en la Posta Central se inició el primer ensayo clínico para una tercera dosis. ¿La población de voluntarios del estudio? Adultos mayores residentes en hogares de ancianos y personal que trabaja en establecimientos de larga estadía (Eleam), además de equipos de salud. Todos cuentan con su pauta completa de inmunización con la vacuna CoronaVac del laboratorio chino Sinovac, la misma que se ha inoculado a casi el 80% de los chilenos.
En estos primeros días, según detallan fuentes del Minsal, casi un centenar de participantes ya han recibido la dosis de refuerzo.
El ministro de Salud, Enrique Paris, explica que se trata de un ensayo “colaborativo, donde participan el Minsal, representado por el doctor Rafael Araos, el Programa Nacional de Inmunizaciones y dos universidades. Tiene la aprobación del comité de ética de la Universidad del Desarrollo y va a contar con una muestra bastante grande, 550 personas”.
Quienes participan de esta iniciativa explican que los voluntarios están divididos en cuatro grupos aleatorios y que se incorporará un “doble ciego”: el grupo “control” recibirá placebo, lo que permitirá medir el efecto de quienes sí serán efectivamente inoculados con alguno de los esquemas.
Mientras, el segundo grupo será inoculado con una tercera dosis de Pfizer, el tercero tendrá un booster de AstraZeneca y el cuarto grupo una dosis adicional de CoronaVac. “Se van a tomar muestras para medir dos cosas: anticuerpos específicos y respuesta inmune celular en tres tiempos diferentes de lo que dure el estudio”, agrega Paris.
El jefe de la cartera sanitaria explica que sostuvo una conversación con la embajadora de Israel en el país, quien le explicó que, para las terceras dosis, el país está partiendo con inmunosuprimidos, adultos mayores, pacientes con comorbilidades y funcionarios de la salud. Eso, señala, podría replicarse en el país. “Esta evidencia nos va a permitir saber si se necesita un refuerzo o no. Nosotros pensamos que sí”, concluye Paris.
Hasta ahora, la CoronaVac ha mostrado buenos resultados para reducir la enfermedad grave y la muerte -90,3% y 86,3%, acorde al estudio del Minsal publicado en la revista científica The New England Journal of Medicine-, aunque solo cuenta con un 65,9% de eficacia para evitar la enfermedad o Covid-19 sintomático.
Sin embargo, el mes pasado, según consignó Reuters, el portavoz del laboratorio Sinovac, Liu Peicheng, señaló que, basados en los resultados preliminares hechos en muestras de sangre de quienes han recibido la CoronaVac, el “efecto neutralizante” de la vacuna frente a la variante delta se reduciría tres veces.
Por ello, la preocupación de las autoridades es que delta pueda evadir con mayor facilidad la respuesta inmune inducida por la vacuna, amenaza que por ahora está medianamente controlada, por el cierre del aeropuerto que se extiende hasta el próximo 25 de julio. Sin embargo, la vacuna de Pfizer ha mostrado una mejor respuesta ante el nuevo linaje, lo que ha instalado la interrogante entre los expertos de si un esquema combinado con CoronaVac podría elevar la inmunidad de las personas vacunadas en Chile.